martes, 21 de julio de 2009

Looking Glass

¿Nunca te has cruzado con alguien por la calle y te has quedado pensando en qué pasaría si tu fueses esa persona?
¿En a dónde irías en ese momento si fueses esa persona?
¿En quién serías, o a que te dedicarías?

A mi me gusta fantasear con esas cosas, pensar en la familia que tendría o los amigos con los que saldría si fuese esa persona.
Las cosas que haría, que diría, que pensaría...
Como sería mi casa, o mi ropa, mis objetos, mi vida...

Pero entonces me topo de frente con una farola y vuelvo a MI vida de siempre, aburrida e insulsa

domingo, 19 de julio de 2009

Time Warp

¡Qué lento pasa el tiempo cuando quieres que algo ocurra!
Parece como que una hora dura dos horas y un segundo se alarga durante una docena de segundos, y te retuerces en el suelo esperando que el tiempo pase más rápido.

Pero luego miras el calendario y aún falta más de un mes, y dices "bah, ¡que le den! tampoco es para tanto". Y consigues por fin que llegue la noche para pasar al día siguiente, tachas el día en el calendario "Chúpate esa, que ya ha pasado un día más"
Caes en la cama y miras el reloj, las dos de la mañana...
Das una vuelta y cierras los ojos...
Te vuelves y miras de nuevo el reloj, las dos y diez...
otra vuelta más...
Ya no lo soportas más, miras el reloj, deben de ser ya las cuatro de la mañana... Son las dos y cuarto...
Te enfadas, te levantas y recoges toda tu habitación, vienen a preguntar:
- ¿A qué viene todo ese ruido?
- Me he desvelado
- Pero los demás queremos dormir...

Ya has terminado, tienes la habitación limpia y brillante, miras el reloj de nuevo... Las tres y media... (y pensar que cuando lo tienes que hacer por el día necesitas por lo menos una semana, y cuando terminaste por un lado, el otro vuelve a estar hecho un asco... Como si tu habitación fuese la mansión de la Barbie a tamaño escala)

Vale, hay que encontrar otra cosa para hacer... ¿molestar al gato?
Si, si yo no duermo aqui no duerme ni dios.
Después de un par de zarpazos buscas entre tus libros (que ya has leido) y encuentras un libro de pintar que tiene tantos años como tú, lo coges y empiezas a pintar.
Cuando tienes el ego engrandecido por tu gran don para combinar colores entre los doce que te vienen en la caja de plastidecor vuelves a mirar el reloj, las cuatro menos diez...

Desesperada recurres a la tila doble... mejor triple, por si acaso.
- ¿Nos vas a dejar dormir o tenemos que atarte a la cama?
- ¡Ya me voy para la habitación! Qué quisquilloso...

La tila obviamente no surte efecto, pero te metes en la cama esperanzada, vueltas vueltas vueltas, la sábana en el suelo, el gato con cara de muy muy pocos amigos, y tú enroscada en la sábana bajera, te lo quitas todo de encima y te tirs en el suelo (que por lo menos está fresquito)
¿Qué es eso que hay debajo de la cama? ¡Anda, cuánto tiempo buscando este bolígrafo!
Y lo primero que se te ocurre es pintarrajearte la piel de puro aburrimiento.
Cuando ya no tienes un solo centímetro de piel accesible sin pintar miras el reloj, las cinco menos cuarto...

Vuelves a montar la cama y te metes en ella... ¡Cómo era la técnica de relajación que te enseñaron en educación física? no lo recuerdo, pero ahora que lo pienso, tengo que recuperar en septiembre un par de asignaturas, madre mía que burrada de apuntes que tengo que... Zzzzzzzzzzzzzzzzzz

¡¡Conseguido!!
Te despiertas a las dos de la tarde del día siguiente con el olor de comida...
¡Qué rico! te despegas las sábanas y te ves toda pintada de bolígrafo, marcas por la cara... !a la ducha!

Y ya se ha pasado la mitad del día, pero, esta noche volverá a ser igual...

Creo que necesito un hobby...